08 Feb ¿Qué es la huella ecológica digital y cómo podemos reducirla?

Toda la información que está en Internet, está alojada en algún servidor, que lógicamente necesita una fuente de alimentación eléctrica para funcionar. El origen de dicha energía eléctrica es al final lo que determina el impacto que nuestra información electrónica dejará en el planeta.

Cuando reenviamos vídeos de WhatsApp, memes, fotografías,  cuando no borramos los correos electrónicos antiguos que no queremos conservar, cuando no borramos fotos que realmente no nos importan, en definitiva, cuando no hacemos una limpieza de nuestra «basura digital», esto tiene un coste ecológico.

¿Sabías que se calcula que ya un 2% de los gases contaminantes a nivel mundial provienen del entorno TIC?

Los millones de e-mails que se envían cada segundo, generan 4 gramos. ( Y gran parte de ellos son correo no deseado y spam).

Usar Facebook durante un año, produce casi 300 gramos de CO2 por persona.

Con estas cifras, multiplicadas por millones de personas, es fácil entender que nuestra vida digital deja su huella en el medio ambiente.

¿Y los buscadores?

Cada búsqueda en Google genera 0,2 gramos de CO2.

Los buscadores pueden usar un servidor ubicado a decenas de miles de kilómetros, para devolvernos la respuesta a nuestra consulta lo más rápido posible. La experiencia de usuario/a mejora con una respuesta del servidor más rápida, pero su uso consume más energía si está lejos. ¡Por no hablar de la importancia de su refrigeración que supone un incremento en la demanda energética!

¿Qué podemos hacer los/as usuarios/as para reducir nuestro impacto ecológico digital?

• Podemos darnos de baja en Newsletters que no nos interesan.
• Borrar de la nube carpetas con archivos antiguos que no necesitamos.
• No reenviar cualquier cosa y ¡Por favor, evita los típicos mensajes en cadenas! Además de un tanto ridículas pueden resultar muy perjudiciales para el medio ambiente.
• Tomar conciencia de que el uso de Internet tiene un impacto en el planeta. Pasarnos horas mirando memes de gatos en Instagram no es gratis, tampoco para nuestra vida social.
• Utiliza un buscador verde. Por ejemplo ecosia  planta un árbol por cada búsqueda y dona el 80% de sus beneficios a la lucha contra el cambio climático.
• Pásate a hostings verdes que utilizan energías renovables.

¿Y las grandes empresas, qué están haciendo?

En 2017, el 7% de la electricidad mundial era consumida por el sector TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación), cifra que se ha triplicado en 2020. Por eso, las empresas tecnológicas no pueden mantenerse al margen de las políticas energéticas.

Greenpeace, nombró en 2017 a Apple la compañía tecnológica más respetuosa con el medio ambiente y preocupada por el cambio climático. En el informe publicado con el ranking sobre el uso de energías renovables en el sector TIC, le seguían Facebook y Google.

Google ha reducido las emisiones y su factura repensando la refrigeración de sus centros de datos. Los equipos funcionan igual a 27 grados que a 20, y el ahorro que implica este cambio es enorme. Junto a Facebook, es pionera en el uso de energía eólica y solar.

Aún así nos queda mucho por hacer a todos/as, y el primer paso se trata de darnos cuenta de ésta realidad: Internet no es ajeno al planeta y el uso que hacemos de él, impacta en nuestro entorno irremediablemente.